Con la llegada del verano, suben las temperaturas, aumentan las horas de sol, nos mejora el humor, cambiamos de hábitos, y empezamos ya a pensar en las vacaciones que, en la mayoría de los casos vienen de la mano de largas jornadas de exposición solar en climas calurosos y húmedos. En general, nos encanta la sensación de tomar el sol por su efecto saludable y favorecedor en nuestra piel, y la irresistible luminosidad que aporta a nuestro rostro. Pero a pesar de todo ello y de que es una fuente esencial de Vitamina D, el sol no es precisamente el mejor amigo de nuestra piel.
Los rayos de sol, sobre todo UVA y UVB penetran la piel acelerando su envejecimiento, la a aparición de arrugas, desafían la firmeza y pueden generar manchas oscuras. Pero además, al exponerte al sol puedes incluso quemar tu piel, que en los peores casos te llevan a padecer múltiples enfermedades como el cáncer de piel. Siendo conscientes de todos los potenciales peligros que entraña la exposición solar, queremos darte una serie de tips para disfrutar del sol con seguridad, ya sea disfrutando de un paseo por tu ciudad, en el coche, supermercado, tomando algo en una terraza o en la playa.
5 reglas a tener cuenta antes de exponerte al sol
1. Primer reflejo
Cada noche, antes de acostarte revisa el indicador de radiación UV del día siguiente y ajusta tu nivel de protección de acuerdo a ello. Si la previsión es de radiación extrema, te recomendamos que te apliques tu protección solar antes de salir a la calle, ya que los filtros solares tardan unos minutos en activarse antes de entrar en contacto con el sol.
La mejor manera de proteger una piel hipersensible consiste en aplicar una primera capa de protección solar, esperar dos minutos y a continuación reaplicar. Según los dermatólogos, este procedimiento asegura la protección ideal. Es muy importante que no nos olvidemos de proteger ninguna zona, incluso aquellas menos visibles, y hacer especial hincapié en las que revelan nuestra edad como las manos o el escote.
2. No bajes la guardia, ni siquiera en la ciudad
A pesar de que la exposición solar en la ciudad es menos dañina que en la playa, también la luz solar urbana indirecta puede ser terriblemente dañina para tu piel. Pero no solamente debemos tener precaución cuando nos expongamos directamente al sol, ya que también los días nublados durante los cuales solemos tener la sensación de que no necesitamos protegernos, tienen consecuencias sobre nuestra piel. Y es que ¡las nubles solamente bloquean el 5% de los rayos de sol!
Aunque instintivamente al hablar de protección solar pensemos directamente en la clásica crema solar con SPF, sabemos que muchas veces este tipo de formatos no son compatibles con tu ritmo de vida, para ello existen más opciones como los fondos de maquillaje con SPF o las cremas de color con pantalla solar.
En países húmedos, un solar resistente al agua y al sudor es un must. Por último, ¡no te olvides de los labios! Su piel es muy sensible a todo tipo de agresiones y es fundamental protegerlos de los rayos de sol con un bálsamo específico para esta zona mientras resaltas tu bronceado y tu sonrisa.
3. Tratamiento especial para las zonas más sensibles
Algunas zonas del rostro y del cuerpo son especialmente sensibles a los rayos de sol, y a veces nos olvidamos de ellas o simplemente no llegamos a protegerlas porque no sabemos cómo hacerlo; para estas zonas se creó Clear Stick UV Protector Wetforce.
Aunque tengas la piel oscura y uses SPF 30, no descuides aquellas zonas en las que la piel es especialmente delicada en las que te recomendamos aumentes la precaución aplicando SPF 50. ¿A qué zonas nos referimos? Contorno de ojos, labios, y otras zonas especialmente sensibles como las mejillas – por su facilidad para la aparición de manchas- heridas, cicatrices e incluso tatuajes recientes. Además, el stick es perfecto para llevar en el bolso, en un bolsillo o en la bolsa del gym, gracias a su formato ligero, discreto y fácilmente transportable.
4. Adapta tu rutina de tratamiento
Con la llegada del verano, proteger tu piel es imprescindible, pero aunque no debes dejar de lado tu rutina de tratamiento habitual, tampoco tienes que sobrecargarla. Si tu crema diaria es demasiado pesada para el clima cálido, cámbiala por una loción más ligera que hidrate la epidermis en profundidad y un serum que hidrate bajo el protector solar. Preferiblemente, este dúo repleto de antioxidantes e ingredientes activos lucha contra los daños causados por el sol como la pigmentación.
Ahora bien, no olvides dejar de utilizar tu tratamiento con retinol durante los periodos soleados, y para evitar cualquier riesgo de fotosensibilización, evita aplicar tu fragancia directamente sobre tu piel. Por último, antes de acostarte, asegúrate de desmaquillarte y limpiar tu piel bien para eliminar cualquier resto de protector solar y a continuación hidrata y repara tu piel con tu tratamiento habitual.
5. Ten cuidado con el agua … ¡o no!
¿Sabías que los rayos UV son -todavía- más peligrosos en la playa y en la piscina? Esto se debe a que el agua refleja más del 30% de los rayos de sol, pero además, la transpiración también puede reducir el efecto de tus productos solares al eliminarlos de tu piel. ¿Qué podemos hacer entonces?
No te preocupes, no te vamos a pedir que te tortures sin sucumbir a la refrescante tentación de darte un chapuzón, practicar algún deporte acuático o simplemente divertirte en la orilla este verano: ¡elige un protector solar water-resistant! En Shiseido, hemos desarrollado una tecnología avanzada para nuestra línea de solares que no solamente hace que la protección siga siendo efectiva en el agua, si no que se activa en contacto con esta, de tal manera que el agua y el sudor se convierten en los mejores aliados de la protección solar.